RAMÓN MARTINEZ – Facilitador “Reflexiones sobre el autoconocimiento” (1era Parte)
“El conocimiento de uno mismo es el primer paso para toda sabiduría”. – Aristóteles
“Yo sé quién soy… y sé qué puedo ser”, dijo Don Quijote.
¨De todos los conocimientos posibles, el más sabio y útil es conocerse a sí mismo¨.-William Shakespeare
“Sólo hay una pequeña parte del universo de la que sabrás con certeza que puede ser mejorada, y esa parte eres tú”. – Aldous Huxley
Como vemos en estas citas a lo largo de la historia de la humanidad se ha planteado la importancia del autoconocimiento y su gestión a través del desarrollo personal para la consecución de las metas y objetivos de cada quien (ya sea obtener un puesto de trabajo satisfactorio, una relación plena o ser feliz…)
Hoy en día esta necesidad es de una urgencia imperiosa ya que vivimos en un ambiente de gran volatilidad, ambiguo y complejo con un futuro incierto, con poca claridad y constante cambio, que nos obligan a manejar grandes incertidumbres y en el que muchas veces estamos imposibilitados en saber que queremos y cómo conseguirlo.
En este escenario si no logras conocerte bien a ti mismo, estar consciente de cuáles son tus fortalezas y debilidades, aprender a identificar tus estados de ánimo y sus consecuencias en tu comportamiento, difícilmente podrás manejar tus reacciones y utilizarlas productivamente. Tampoco podrás comprender bien el comportamiento de los que te rodean, ni podrás actuar con efectividad en tus relaciones interpersonales todo lo cual resulta esencial para ambicionar una vida plena en todos los sentidos.
Es básico entender que:
Las valoraciones, las distintas impresiones, juicios y expectativas que nos creamos sobre los temas y situaciones de nuestras vidas se ven influidos por diversos factores que configuran nuestra personalidad como el marco familiar, las experiencias previas, las capacidades naturales y principalmente el sistema de creencias.
Este sistema de creencias aprendidas desarrollan verdaderas conexiones neuronales automáticas que hacen que ante un estímulo reaccionemos desde lo aprendido sin reflexión y sin posibilidad de gestión porque se disparan desde la inconsciencia de lo reactivo. Por lo general, adoptan la forma de pensamientos o de diálogo interior: (No soy capaz, Voy a estropearlo como siempre, a mi no me quiere nadie, soy demasiado mayor…)
Conocer y comprender el funcionamiento de nuestra mente, así como dominar y gestionar de una forma más eficiente nuestros pensamientos nos capacita para detectar, cuestionar y trascender todas aquellas creencias limitantes, falsas o erróneas acerca de la visión que tenemos de nosotros mismos y del lugar que ocupamos en la sociedad.
La neurociencia y los conocimientos actuales sobre el cerebro ( cerebro reptiliano, cerebro límbico y neo cortex) explican la relación que hay entre éstos pensamientos y la liberación hormonal que desencadena una respuesta emocional que pueden disparar una reacciones o comportamientos que generen resultados contrarios a lo que deseamos.
Ramón Martínez
Facilitador Insight